CREACIÓN LITERARIA

PROSA

Estrategia: Cuento de las seis preguntas
      -         ¿Quién?: Una chica que se llamaba Nina

-          ¿Dónde?: En su casa

-          ¿Qué hacía?: Pensaba en el accidente que había tenido una compañera de trabajo

-          ¿Qué dijo?: Se prometió a sí misma ser prudente

-          ¿Qué le decían?: Su familia la decía que cambiara de trabajo porque era muy peligroso

-          ¿Cómo terminó?: Nina decidió buscar otra alternativa

Aquella tarde de domingo, Nina estaba sentada en el sofá mirando como nevaba a través del gran ventanal de su salón. El día se había despertado nublado y según estaba previsto, la nieve había hecho su aparición a mediodía.

Mientras miraba cómo la nieve iba cubriendo los jardines y los bancos del parque, pensó que al día siguiente tendría que coger el coche una vez más para ir a trabajar al pueblo. Tan sólo eran 45 kilómetros pero lo cierto es que las máquinas quitanieves estaban desde primera hora de la mañana circulando por la carretera y echando sal sobre el asfalto con el fin de evitar las heladas.

No obstante, apenas hacía caso a la película que se veía en la televisión en ese momento pues lo de la nieve la preocupaba, ya que era una carretera de mucho tráfico y tenía un puerto que frecuentemente estaba cubierto de nieve. La venían a la mente recuerdos del accidente que una compañera de trabajo había tenido hacía un año cuando ésta se salió de la carretera y dio dos vueltas de campana. Fue al coger una curva cuando frenó el coche y comenzó a derrapar con el hielo a pesar de que era prudente y respetaba siempre la velocidad.

A Nina le gustaba correr; de hecho, la habían puesto recientemente una multa de tráfico por exceso de velocidad. Sin embargo, se prometió a sí misma ser prudente al día siguiente porque por nada del mundo quería dar un disgusto a su familia.

Sus hijos no querían que Nina pasara tanto tiempo en la carretera y la pedían que cambiara de trabajo. Sin embargo, el que verdaderamente pensaba en ello y se lo planteaba cada día era su marido Joseph, quien no dudaba en acompañarla en cuanto tenía un día libre.

Muchos fueron los sustos que se llevaron pero por suerte, ninguno más en esa carretera iba a tener lugar puesto que Nina tomó la decisión de buscar otra alternativa.

 

 

VERSO

Estrategia: letanía

Nuestro planeta es el lugar donde se realizan todos tus sueños.

Nuestro planeta es el mejor de todo el sistema solar.

Nuestro planeta es la mejor casa del mundo entero.

Nuestro planeta es el mejor lugar donde vivir.

Nuestro planeta es relajante como la playa.

Nuestro planeta es nuestra vida.

Nuestro planeta es sonrisa.

 

Esta creación ha sido realizada por alumnos de 2º de Primaria durante el periodo de prácticas. El tema principal es el planeta ya que habían estudiado sobre ello y formaba parte de su temario.

El método fue el siguiente: se apuntaban las frases que iban saliendo en la pizarra y al final se hizo un resumen recogiendo las más bonitas, y completas.

A continuación se pueden ver imágenes de lo que ellos mismos hicieron.

 

 

 

TEATRO:

Narrador: Estaban juntos desde hacía 49 años, bueno, 52 contando desde que habían comenzado como novios en el pueblo. Luego él se fue a la mili y cuando volvió se puso a trabajar en una fábrica en una ciudad del norte y pronto se casaron y llegaron los hijos.

José: - Araceli, te he preparado la cena, ven a la cocina.

Araceli: - Hoy también has hecho sopa ¡Qué rica!

José: - Tómate las pastillas ahora porque si no se te olvidarán.

Araceli: - ¿Por qué? Si no me duele nada…

José: - Son para la memoria, Araceli, tómalas y así recordarás mejor las cosas.

Narrador: Siempre que podían volvían al pueblo, en vacaciones o por Navidades; primero con los padres de ambos, luego solos. Antes de jubilarse él, se compraron un piso y una vez jubilado iban al pueblo y pasaban largas temporadas. Ahora estaban allí.

Araceli: - Deberíamos esperar a que viniera mi madre e ir a casa, se ha hecho de noche.

Narrador: Una sombra de tristeza atravesó la cara de él. Se acordaba de cuando eran jóvenes y cuidaban de sus padres y éstos empezaban a chochear, sobre todo su suegra, que fue la última que murió.

José: - No te preocupes Araceli, aquí conmigo estás bien, yo te cuidaré.

Narrador: Con cariño la llevó al sofá y la puso una toquilla por encima de los hombros y la manta por las piernas.

Araceli: - Pero yo quiero ir con mi madre…  ¿Dónde está José?

Narrador: De repente se levantó y se dirigió hacia la puerta. José, como todas las noches, había echado el pestillo en previsión de que ella fuera a abrir la puerta.

José: - Cálmate, ven conmigo al sofá y mañana iremos a buscar a José y los niños.

Narrador: Ella, dócilmente, dejó que él la llevara al cuarto. Solía ser por la noche cuando ella se “despistaba” más; ya se lo había dicho al médico y éste le había recetado una pastilla.

José: -Araceli, vamos a ver la tele un rato. Te arroparé con la manta.

Araceli: -Vale papá.